Aire de Bárdenas es un hotel de 4 estrellas ubicado en medio de un campo de trigo, junto al Parque Natural de las Bárdenas Reales de Navarra y a 3 km de Tudela.
El proyecto es obra de dos arquitectos Mónica Rivera y Emiliano López, y ha sido galardonado con el Premio al Diseño 2008 de la Cámara Navarra de Comercio en la categoría de hostelería. (En la categoría de Comercio el vencedor fue Joyería Danieli, un espacio no menos increíble e impactante).
¿Quién quiere ir a un hotel en un lugar tan inhóspito?
A muchos les parecería una locura abrir un hotel de 4 estrellas en una zona de suelos áridos, casi desérticos. Para que el proyecto funcionara se construyó un hotel que rompe con la idea misma de hotel. Es un conjunto arquitectónico que se ha creado en horizontal, así que para empezar no te imagines un edificio en altura. Sus 22 habitaciones son 22 cabinas prefabricadas y reciclables, que han sido estratégicamente ubicadas para contemplar el entorno exterior y disfrutar de la belleza del austero paisaje circundante. Las casetas disponen de pequeños jardines parapetados por una fachada de lamas de madera, cuya procedencia no es otra que las cajas en las que se recogen frutas y verduras. Gracias a este peculiar muro se detiene al viento, pero deja pasar aire. En los jardines nada mejor que frutales y bañeras, para disfrutar de relajantes momentos de placer. Y para completar el proyecto, contaron con la colaboración del barcelonés estudio Lamosca para la señáletica del edificio. El resultado, un hotel rural del Siglo XXI.
En resumen diremos que no hay nada como una buena idea, buenos profesionales y un poco de marketing para conseguir no sólo gente dispuesta a venir al hotel, sino que cuando se van ya piensan en cuándo podrán repetir.
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