sábado, 23 de junio de 2012

Recuperando bidones de gasoil

En Comando Guardar siempre hay sitio para los artistas que se dedican a transformar lo que ya no utilizamos en objetos para nuestro día a día. Por eso, en este post os muestro algunas piezas de mobiliario realizadas a partir de bidones vacíos. Hasta ahora solo había visto estos bidones transformados en barbacoas... pero además de este uso podemos darles otra segunda vida.

Stanker (François Royer) transforma estos bidones en todo tipo de objetos, pero sobre todo me ha gustado su mecedora o rocking chair: Fat Bob, que fue uno de los proyectos finalistas del Premio Europeo de Diseño y Medio Ambiente best_ed!



Vaho (Barcelona) crea todo tipo de bolsos a partir de banderolas publicitarias, pero además de moda también tiene estos bidones-silla cuyos asientos están igualmente hechos a partir de lonas publicitarias.



Lockengeloet fabrica estos armarios que además son apilables si queremos mayor capacidad de almacenaje.

El italiano Alberto Dassosso (Vibrazioni Art Design) también utiliza los bidones para crear mobiliario a partir de su hojalata.



¡Gran trabajo el de todos ellos!

Un museo diferente: Hakone Open-air Museum

Un museo no es un centro comercial donde los niños puedan "hacer lo que les de la gana", pero tampoco tiene que ser un sitio aburrido. Afortunadamente en la actualidad muchos museos cuentan con actividades especiales para niños y grupos escolares: talleres artísticos, visitas didácticas... Convirtiéndose así en un sitio al que les gusta ir.

Hoy por casualidad he descubierto un museo al aire libre que me ha parecido fascinante: Hakone Open-air Museum, está en el Parque Nacional de Fuji-Hakone-Izu en Japón y sus visitantes puedes disfrutar tanto de todo tipo de esculturas y obras como de un picnic con sus amigos y familia. Un modelo de museo más flexible en el que personas de todas las edades pueden disfrutar del arte y la naturaleza.

Algunas ciudades también están siguiendo esta tendencia: calles que exhiben impresionantes esculturas, paredes transformadas en murales, arquitectura urbana que es en sí misma una obra artística...

Pero volvamos a Hakone Open-air Museum, como se ve en el mapa que os muestro es un espacio de grandes dimensiones y donde se haya Woods of Net, un pabellón permanente que alberga en su interior un gran parque infantil hecho con ganchillo. La autora de esta obra es Toshiko Horiuchi quien lo diseño junto a un grupo de arquitectos e ingenieros y después de 3 años de trabajo lo inauguraron en el año 2000.



Pero lo curioso es cuando leo que la idea se la dieron los niños, y es que al parecer Toshiko Horiuchi estaba exponiendo una de sus obras en un reconocido museo cuando dos niños entraron a la sala y al ver su obra se lanzaron y comenzaron a escalarla saltándose cualquier tipo de norma o protocolo. Esto hizo que viera su obra de una forma más viva y cambió el blanco por el ganchillo de vivos colores. Sabiendo que lleva 12 años abierto parece que el ganchillo es resistente (no sé si habrán tenido que "recomponer" alguna zona) y que está tejido a conciencia para aguantar los tirones, saltos y acrobacias de los más pequeños.

Llamativa es también la obra "Cosmical Colour Space" de Shigeo Matsubara. Y muy funcional la zona del footbath, así si estamos cansados de caminar por el recinto podemos hacer una paradita y refrescarnos los pies.



Ah, gracias al blog de Duduá he descubierto también que Toshiko Horiuchi estuvo invitada a un Centro Comercial de Zaragoza donde realizó la obra Hamaca de Arcoiris.

sábado, 16 de junio de 2012

¿Shandy de Naranja o de limón?

¿A quién no le apetece una cervecita en verano? Pero cuando tenemos que conducir o vamos a estar bajo el sol no es bueno ingerir alcohol porque nos deshidrata. Hasta ahora las cerveza con gas o con limón eran una buena opción, porque nos refrescaban y al mismo tiempo nos quitaban las ganas de tomarnos esa cañita.

Este verano Cruzcampo ha lanzado una Shandy con sabor a Naranja. Gracias a Bloguzz he sido una de las primeras en probarla, y la verdad es que está buena. Quizá a quienes les guste más el toque ácido del limón prefieran su Shandy Limón de siempre, pero no cabe duda de que de vez en cuando a todos nos gusta cambiar y la Shandy Naranja es una buena alternativa.

Como me enviaron a casa un pack de cervezas, las metí en la nevera y he aprovechado para invitar a una Shandy Naranja a las visitas. Cuando les he preguntado cuál prefieren si la Shandy de naranja o la de limón, casi todos se han inclinado por la de limón, la de naranja les ha gustado (nadie ha dejado nada en la lata!) pero parece que por su dulzor le resta sabor a la cerveza.

Si eres de cervezas fuertes y con mucho cuerpo, las shandys te parecerán un "sucedáneo", pero para quienes preferimos cervezas más ligeras es perfecta. Eso sí, quizá le falte un poco de espuma, ya que si la sirves en un vaso te das cuenta de que no tiene nada de espuma y su aspecto recuerda más al de la sidra con gas. Algo que me gusta mucho es el envase, más alargado y estilizado que la lata de 33cl tradicional.

En conclusión, si te gusta la Shandy con limón te animo a que pruebes su hermana de naranja y compares. Quizá es porque a mí me encantan las novedades, pero creo que yo voy a alternar una y otra. A veces de naranja y a veces de limón... ¿para que elegir cuando podemos disfrutar de las dos, no?